jueves, 30 de diciembre de 2010

No leas

Llueve afuera de la ventana,
las gotas se escurren por caminos
que nunca se han andado.
Al ver las gotas que se deslizan
por el vidrio me recuerdo,
no me preguntes porqué,
de los caminos que caminaste
en mi piel y en mis sentidos.
Caminos que nunca han sido
recorridos antes pero que
tu los abristes con la punta
de tus dedos, desde otro tiempo,
desde otro espacio.
Desde una dimensión que no
es la mía pero a la que quise entrar
con ese ardor de saber que,
de haberte encontrado
deambulando de noche
por las calles bajo la luna llena,
hubiese dado mi piel completa
para que fuese el lienzo
donde escribieras...
La lluvia se detiene .
Es el tiempo de dejar de
escribir y de que tu presencia
se pierda en la neblina de
la no presencia.
Por eso, por favor,
no me leas.

Invitación

Como fruta madura
espero tu llegada,
lista para ser cortada
y disfrutada.
Ven, tómame:
mis labios son dulces
y mi piel es suave.
Ven, tómame:
mi cuerpo guarda
el secreto de la
felicidad en sus misterios.
Ven, tómame:
mis brazos prometen
ser un oasis
en tu viaje.
Ven, tómame:
mis dedos pueden
dibujar arabescos
en el lienzo de tu piel.
Sólo tómame
y verás como
mi sol pinta
tu cielo de mágicos destellos...

Recolectando

Escucho miles de historias,
cada una de ellas con tristezas
bordadas con fuego en un
interminable festón.
Las recolecto, cada una de ellas
deja un punto grabado en
algún lugar de mi corazón.
No las puedo borrar,
por lo menos algo
debo recordar.
Para que las vivencias
no caigan en el olvido,
para que las palabras no
retumben sólo entre las
paredes, para que siempre
recuerde que soy humana.

Enamorada

Ha esperado parte de su vida
por el que será su gran amor.
Y parace ser que su Príncipe
ha tocado a la puerta de
su Castillo.
Todas sus conversaciones
giran sobre el que
ha cautivado su corazón,
y cuando le preguntan que
es lo que le sucede
sus ojos se vuelven más
brillantes y sus mejillas
se ruborizan con
gran facilidad.
No es necesario que lo diga,
todo el que sabe leer miradas
sabrá que esta enamorada!

miércoles, 14 de julio de 2010

Y sigo ignorando

La mayor parte del
Tiempo lo ignoro,
Sé que está ahí pero
Me niego a sentirlo
Más allá de lo que
Puede hacerme daño.
Pero hoy se ha hecho
Sentir con fuerza
Como renegando
Por todos los años
Que ha estado olvidado.
Me ha hecho sentir
Que está acá,
Con todas las
Ganas de sentir
Y explorar lo
Que me he prohibido.
Y los deseos de lo
Que no conozco
Se hacen patentes,
Se cuelan en mi
Conciencia-inconsciencia…
Y recorren todo
Mi cuerpo, ese que he
Ignorado por completo.

Si y No

Sí quiero besar
Unos labios ardientes.
No quiero hacerlo
Sólo por besar.
Sí quiero sentir
Unos brazos alrededor
De mi cintura.
No quiero sentirlos
Sólo por unas horas.
Sí quiero sentir el
Calor de un cuerpo
Junto al mío.
No quiero que sea
Sólo por jugar.
Sí quiero bailar
Junto a alguien
No quiero que sea
Sólo por bailar.
Sí quiero amar
A alguien…
No quiero que sea
Sólo por aventurar…

En voz alta

Al atardecer suelo verte,
eso no ha cambiado,
caminas a mi lado
acompañándome...
Pero tu voz se ha
perdido en los
vericuetos de mi
imaginación,
ya no me cuentas
los sueños de aquel
que te cantaba,
ni me das a conocer
más su voz...
Y todos los días que
te veo susurro
una despedida
que se queda suspendia
en mis labios,
como si no
quisiera dejarlos.
Pero cada vez me
convenzo que tengo
que dejar de
susurrarla,
debo gritarla
al viento...
pero temo
que entonces el
encanto se pierda
por completo
y en su lugar
quede la nada,
el vacío y la
ausencia como
reino.

sábado, 5 de junio de 2010

Gotitas

Cae una lluvia fina, de esa que a penas y te moja, es como que sólo quisieran las gotitas de colores acaricar tu alma.
De todas maneras hago uso de mi sombrilla, no vaya a ser que por unas gotitas me enferme. Pienso en todo y en nada mientras me abro paso entre los charcos que empiezan a aparecer y me parece irreal caminar entre los jardines de la universidad. ¡Hace tanto tiempo ya que caminaba entre estas sendas con mis libros y cuadernos al hombro!. Hoy son otros lo que presurosos se dirigen a clases mientras yo enfilo rumbo hacia casa, pero tomo mi tiempo, me gusta sentir la caricia helada de la brisa en mi rostro.
Y como de la nada, como traídos por el repiqueto de las gotas en mi sombrilla, los ecos del pasado viene a mi memoria: risas, bromas, miradas, palabras sabias, vivencias, todo se mezcla en mi añoranza...
Los edificios que voy dejando atrás contienen parte de mi historia entre sus paredes, una historia que, al mirar hacia atrás, dibuja una sonrisa en mis labios. Sigo caminando bajo la lluvia, las gotas se han intensificado, no me preocupa, en realidad son viejas amigas cantarinas que traen en su son varios recuerdos de mi corazón.

Frío 2

Corazón...
es el frío del ambiente
el que parece que no deja
latir tus sueños
¿acaso no ves?
está lloviendo,
y la brisa que se
cuela por la ventana
trae consigo un
beso helado...
No Corazón,
no es que la frialdad
ha cercado tu campo
de flores ni tampoco
ha congelado las
alas de las mariposas
multicolores...
Comprende es la lluvia,
es la brisa...
Déjame engañarte
que no eres tú.

Otra vez...

Hace dieciséis años partiste, te fuiste
en la madrugada sin
que nadie pudiese tomar
tu mano para acompañarte
mientras ascendías...
Y el no estar presente
se convirtió en parte
del dolor que dejaste
con tu ausencia, si bien
es cierto las explicaciones
que se dieron fueron
razonables no compensa
el que no te vieras rodeada
de las personas que te amamos...
que te amamos aún hoy después
de tan larga ausencia.
Y hoy he sentido que te vuelves
a escapar de entre mis manos,
que me quedo huérfana otra vez,
que la soledad de no verte
corroe, otra vez, mis entrañas...
Y es que te hacías presente en
los relatos de ese viejito que
creció contigo, que sus cuentos
nos hacían trasladarnos a tu
propio tiempo y espacio,
que comprendimos muchas
verdades que nunca pronunciaste
y cada vez más crecía la admiración
de nosotras por el temple
con el que viviste la vida.
Y hoy ese viejito se fue contigo,
quizás necesitabas compañía
para la infaltable taza de café
de la mañana... pero no dejaste
que nos contara más sobre tu vida
y que nos llevara a conocer los
parajes por donde corrías
de pequeña...
Hoy se fue mi viejito y con él
tus recuerdos...
Te me vuelves a escapar de las manos...
pero nunca te podrás ir de mi corazón,
tu huella sigue húmeda en mi vida
Y nunca podrás irte de esos dominios,
ni aún cuando yo misma fallezca...

Cuento Realidad

Vengan, les voy a contar
un cuento que encierra
una gran verdad:

"La reina de una
Tierra sin Igual,
una mañana soleada
dejó su palacio sin par.
Atrás quedó, en una cajita
de cristal, cualquier
tristeza que le hiciese llorar.
Y se puso su mejor sonrisa
y unas antenitas para alegrar
las caritas que pronto
iría a visitar...
Unas pequitas también dibujó
en sus mejillas de coral,
y una naricita roja fue el
elemento final con el que
decoró su gran disfraz.
Y salió por las montañas
y por los valles también
trayendo alegría por doquier.
Las sonrisas que le regalaban
eran su tesoro preciado
y llenó su alma de la dulzura
de los chiquitos bienamados...
Con un beso sanaba heridas
y con caricias
calmaba el miedo
de todos aquellos que
le salían al encuentro...
Al caer la tarde regresó
al palacio donairoso,
y con el último rayo de
sol que alumbró
se dio cuenta que ese día
le había traído más riqueas
que con las que empezó..."

Para vos... sí, vos que me hiciste partícipe
de esa riqueza que encontraste
perdida en los chiquillos
que visitaste...

Karlacris, 03/05/10.

sábado, 1 de mayo de 2010

Sí.

Quiero rozar tu piel
lentamente con mis dedos,
hacerlo de manera imperceptible
para que no despiertes,
dibujar sendas antiguas
en tu espalda que
me conduzcan a la
felicidad deseada.
Deseo enredar mis
dedos entre tus cabellos
y humedecer mis labios
en tu boca...
Zambullirme por completo
en el oasis de tu cuerpo
y dejar que la realidad
sobrepase mi deseo.

sábado, 17 de abril de 2010

Guiño

La brisa de la recién
caída lluvia juguetea
con mis ganas de soñar,
el agua ha venido a calmar
la sed de la tierra y las
gotas pequeñas
han entretejido
mis ansias de cantar...
Mi voz se niega
a callarse y mis dedos
se deslizan con rapidez
para dar a luz
la melodía
de un corazón cantarino...
Y le hago un guiño
coqueto a la vida misma
y ella me responde con
una sonrisa de complicidad.

miércoles, 13 de enero de 2010

Ecos

Todo esté quedando 
solo, sin ningún objeto
que recuerde nuestra presencia.
Ahora se escucha el 
eco de los pasos en 
los pasillos y en los
cuartos desolados.
Llegó la hora de decir 
el primer adiós,
el adiós a la casa que 
me cobijó por más
de una década...
Oculta secretos que
sus paredes guardan
celosamente, son 
confidentes leales
que nunca revelerán
palabra alguna...
Esta casa ahora
sólo está llena de memorias
que nunca serán contadas,
pero que han quedado 
grabadas con fuego
en las memorias de los
que pasamos por acá
aunque sea por un breve
período.
Y este es sólo mi primer adiós,
luego tendré que afrontar
la verdadera despedida,
aquella de la que ahora ya 
no hay marcha atrás.