martes, 11 de diciembre de 2012

Autoimposición

Quiero hablar contigo,
escuchar tu voz,
el canto de tu risa.
Pero me autoimpongo
una muralla que no me 
permite cumplir mi deseo.
Sólo sé que se me desvive
el corazón por tenerte cerca
y mi razón se interpone borrando
los senderos que me puedan
llevar hasta tu presencia.
Y mientras tanto... tu imagen se
vuelve fuerte al mismo tiempo que 
se desdibuja en la distancia.
En el espacio entre tu y yo
sólo viven los ecos de los
días antiguos, de las palabras recordadas.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Te sueño

Quiero sacarte de mi mente.
de mi vida  y de mi ser.
Más lo que logro es soñarte,
atraparte en mi imaginación.
Y mientras más trato,
más fuerte te plantas en mi vida,
se me va el tiempo divagando en que me 
gustaría bailar contigo, en estar
en tus brazos mientras la música nos rodea y
besar tus labios hasta que la eternidad nos alcance.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Y así de fácil

Así de fácil que entró en mis pupilas,
así también sale por las mismas.
Esa desazón de no saber por donde terminar
lo que nunca empezó es lo que me llena este día.
De no saber si quitarle el nombre a algo 
que jamás pude nombrar porque sólo fue fantasía.
¿Acaso las fantasías pueden ser nombradas?
¿Acaso tienen existencia?
No. No tienen cuerpo ni tampoco tiempo.
Sólo son ideas flotando en la lejanía-cercanía del alma.
Y es por eso quizás que son más difíciles de comprender,
porque ese material incoherente no puede ser asido
como las hojas para estrujarlas.
Sólo queda una especie de vacío donde estuvo anclada.
Y al final no importa si pensaste o no lo hiciste,
sólo importa sacar de tu mente lo inexistente.
La verdad: no es fácil sacarlo,
es más fácil que entre y se instale.
Pero que no sea fácil no significa
que no se tiene que hacer.

martes, 18 de septiembre de 2012

Yo

Y esta soy yo. Así, sin más ni menos.
Yo.
Con mis alegrías y mis tristezas,
con lo que he aprendido
y con lo que me falta por aprender.
Con mis sueños y mis fracasos,
con lo que deseo y lo que aborrezco.
Soy yo.
Y si no lo puedes ver o no lo quieres ver,
nada puedo hacer.
Pero no me quito ni lo andado,
ni lo bailado.
Al final los años vividos son los
que me han forjado en lo que soy hoy,
en lo que puedes ver en la actualidad...

jueves, 13 de septiembre de 2012

Abrazos

No sabes cuanto extraño los abrazos mañaneros, esos que me dejaban en una nube por un tiempo. 
Extraño sentirme rodeada por tus brazos, sentir el contacto de mi cuerpo con el tuyo.
Extraño...

Deseos

Por primera vez tuve ganas de besarte, de sentir tus labios contra los míos, de poder sentir la frescura de tu boca.  Sí, eso provocaste en mí hoy y no sé si alguna vez podré hacerlo. Pero por hoy sólo disfruto saber que en mi corazón todavía hay un latido de vida, que no se ha muerto en mi el deseo de besar a alguien...

martes, 11 de septiembre de 2012

Dudas

Siempre me carcome la duda, dudas que revolotean en mi cabeza como mariposas negras... sí, porque me asfixian y no me dejan sentir.
Y me pregunto seriamente que podría hacer que te fijaras en mi y no logro encontrar una tan sola respuesta.
Quizás es como esa canción en la que se ponen condicionales "si fuera más guapa", "un poco más lista", "si fuera especial", "si fuera de revista"... pero no soy nada de eso. Sólo soy yo, con estas manos que desean acariciarte y con estos labios con los que quisiera sentir los tuyos, sólo soy yo queriendo perderme en tus ojos...
Y siento que nada que pueda ofrecer podría ser suficiente para que tu me miraras a mi, como lo soy y como lo que puedo ofrecer.
Y entonces, cierro mis ojos y tapo mis oídos, así no escucho a mi corazón decir que a lo mejor se pueda vencer las dudas...

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Tocarnos



 
Se me hace imperioso
el querer tocarte,
sentir con la punta de mis dedos
tu piel aunque sea por unos instantes.
Me hace saber que eres real,
Que vives y respiras como yo.
Y me encanta que tu estires tu mano
atreviéndote a sentirme también,
aunque todo sea por unos instantes.

martes, 17 de abril de 2012

Silbando en silencio


Llueve sobre San Salvador, gracioso porque estamos en abril y se supone que en este mes no llueve. Mayo es el mes de las lluvias. Pero como todo en la vida, parece que el clima no sigue las lógicas de antaño, sino que se inventa nuevas formas para interactuar en el planeta.

Llueve y el ambiente se torna más frío, tanto que necesito usar mi sweater. Y calcetines: mis pies necesitan calentarse también. Cierro las ventanas y trato de no ver las gotas de agua deslizándose en una danza sin fin. Prefiero pensar que abril es de calor, no de frío.

Tengo mucho que hacer, no me puedo quejar por no tener actividades que me mantengan ocupada... más bien necesito que me abstraigan de este carrusel que parece girar sin ningún sentido, o por lo menos que ya se me ha hecho cansado.

Pero hoy, quizás por la lluvia... no, no es la lluvia: es el recuerdo que se complace en mostrarme diapositivas del pasado.

Entonces empiezo nuevamente:
Pero hoy, el recuerdo me ha llevado por muchas sendas con un sólo fin: encontrarte. No sé porque te relaciono con la lluvia. No por el frío, ni mucho menos por que se le puede cataogar de triste. No, es simplemente que cuando llueve me acuerdo de ti, sin pensarlo, sin saber como te instalas en mi mente. Y me haces compañía aún si saberlo. ¿O te darás cuenta que una parte de ti se viene para acá? a lo mejor la luna te cuenta que el sol le comentó que te vio sentado a la par mía. O quizás es la luna misma la que te ha visto por estas tierras.

No sé. Lo único real es que llueve en San Salvador y se me hace imposible no traerte a mi propia realidad, para que así "no tiriten de frío los sueños de cada canción".

Y mientras termina la lluvia, la acompaño silbando en silencio esperando que alguna vez decidas pasar a saludar, aún si no hay lluvia de por medio...

miércoles, 11 de abril de 2012

Apareces de pronto,
sin previo aviso,
como si caminaras de
puntillas para que no
te escuchara llegar.
Unas cuantas palabras
hicieron su cometido,
te trajeron sin permiso
a mi conciencia y contigo
los recuerdos zurcidos
del tiempo antiguo.
Y no sé si los quiero
de regreso interrumpiendo
mis amaneceres tranquilos,
trayendo palabras que no tuvieron
asidero real alguno...
Y aún con la reticencia
con la que se arma
mi cerebro,
el corazón me hace una
jugarreta, pero con plena
convicción de saber
que nada es cierto...

lunes, 30 de enero de 2012

En la esquina

Encuentro rastros de tu presencia
en los lugares menos sospechados,
aquellos en los que aseguraría
que no estarías nunca,
ni siquiera por casualidad.
Y ahi estás, paso la 
página y me saltas al
encuentro. Sin más.
Sólo te quedas ahí, mirándome
sin verme y sin saber que he encontrado
huellas que me llevarían hasta tí 
si las siguiera.
Sólo si las siguiera.

sábado, 7 de enero de 2012

Mantenimiento

Hace tiempo
saqué mi corazón
de circulación.
No le había dado
el mantenimiento
que cada tanto
necesitan los corazones.
Y el pobre llevaba
ya muchos rayones
y muchos golpes también,
digamos la verdad:
al pobre no le había ido
bien, sino que muchos lo
dejaron caer sin pensar
mucho en lo que podía
suceder con él.
Así que, como buena
dueña de él,
lo tomé de donde lo
habían dejado pisoteado
y lo traté de reparar.
Por un lado pensé en
hacerle una coraza:
dura y con miles de
agujas que pincharan
al que se atreviera a
acercarse más allá
de mi pseudo comodidad...
Pero en medio de la construcción
me di cuenta que el pobre
languidecía sin poder suspirar
(que las mismas púas que
confeccioné para su protección
se le inscrustaban en el interior).
Deshaciendo el trabajo hecho
pensé en hacerle una cajita de
plexiglás: para que lo pudiesen
ver pero no tocar... Y lo
único que conseguí fue
aumentar su soledad...
Así me tocó volver a empezar...
Pero me di cuenta que no podía
aislarlo, que su felicidad está
en el compartir, en el dar,
que así se siente feliz y también
comrpendí que su misma fragilidad
le hace más fuerte,
que todas sus experiencias le
han llevado a ser lo que es,
y que su esencia, en realidad,
es lo que no quiero perder...
Así que tomé aire y lo dejé tal cual:
con su fragilidad a cuestas, con su alegría
sin par, con su dulzura y con su locura...
Lo dejé ser y ya no peleé con él...
Le dejo tocar otros corazones
y que lo toquen a él...
Y me hace feliz. Me hace "Ser".
(Eso sí: le doy mantenimiento "preventivo"
de cuando en vez!!)